La ciudad de las leyendas
Cracovia es la antigua capital de Polonia y una de las ciudades más bonitas del país, que atrae año tras año a millones de turistas. Pero no solo es conocida por contar con la plaza medieval más grande de Europa en su casco antiguo, por ser Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, por los restos de la muralla o por el Castillo situado en la colina de Wawel; sino también por todos los tesoros, secretos y leyendas que esconde.
El toque de trompeta
Si visitais la Cracovia está será una de las melodías que escuchareis mientras paseáis por el centro de la ciudad. Dadle al Play, que son solo 33 segundos y os ayudará a entender la historia.
¿Ya lo has escuchado? ¡Venga, que estás aún a tiempo!
Un final un tanto extraño para una melodía, ¿no os parece?. Pues sí, como ya bien habréis imaginado hay un motivo.
A cada hora en punto, en la Plaza del Mercado (Rynek Główny) de Cracovia el tiempo se detiene por un momento dejando paso al trompetista y esta melodía, llamada Hejnal Mariacki. Según cuenta la leyenda conmemora un acontecimiento del siglo XIII, cuando los Tártaros intentaron invadir la ciudad y el trompetista quiso alertar de su llegada desde la torre más alta de la Basílica de Santa María (Kościół Mariacki), pero desgraciadamente una flecha del enemigo le sorprendió, impidiendo así que acabase las últimas notas.
Las dos Torres de la Iglesia de Santa María
La Basílica gótica de Santa María se construyó en el siglo XIII por dos hermanos arquitectos, se proyectó que está debía tener dos torres, por lo que cada hermano se puso manos a la obra y se encargó de una de ellas. A medida que las torres ganaban altura, también lo hacia la competencia y rivalidad de los hermanos por conseguir que su torre fuese la más alta y bonita y en el menor tiempo posible. Llegó hasta tal punto que el mayor, al ver que la de su hermano podía superarle; tuvieron una discusión cerca de la orilla del río Vístula y acabó matándole con un cuchillo. Aunque los remordimientos pudieron con el y y se suicidó tirándose desde la torre.
De hecho en uno de los pórticos de la Lonja de los Paños (Sukiennice) cuelga un cuchillo colgado de una cadena, como símbolo de este crimen y para que los ciudadanos fueran conscientes y no volviese a ocurrir algo similar..
Peeero… hay otra teoría, y es que seguramente se construyó una más alta que la otra, ya que la torre tenía también una función defensiva; para prevenir de posibles ataques enemigos y de esta manera había más visibilidad. Tiene más lógica, ¿no?
La piedra mágica
Si eres curioso y observador, seguramente en tu visita al patio del Castillo Real Wawel, te sorprenderá que en una de sus puertas, justo al lado de la pared, hay personas que se «plantan» allí y mientras tu visitas los otros rincones del castillo, volverás al mismo sitio y allí seguirán, por minutos e incluso horas, pero ¿por qué?, la respuesta, es otra leyenda.
Hace mucho tiempo Shiva lanzó 7 piedra mágicas por el mundo cada una relacionada con un cuerpo celeste; las cuales dicen que se encuentran en: Dehli (la Luna), Delfos (Venus), Jerusalén (el Sol), la Meca (Mercurio), Roma (Marte) , Velehrad (Saturno) y la última en Cracovia (Júpiter).
Se cree que el chakra que irradia energía del Dios está en el presbiterio de la Iglesia de San Gereón, a la que no tienen acceso los turistas, solo quedan los cimientos y la cripta san Stanislav; por eso tienen que conformarse con la pared que da a este punto. De acuerdo a las mediciones Wawel es el lugar de Polonia que más energía irradia, por ello dicen que está piedras protege a la ciudad de desastres; como ocurrió durante la Segunda Guerra Mundial en la que Cracovia se salvo de la destrucción.
Se encuentra en la esquina noroeste, pero como ya he dicho con que prestes un poco de atención, descubrirás tú mismo cuál es.
El dragón y su cueva
La leyenda más antigua cuenta que hace muchos años bajo la colina donde se sitúa el palacio de Wawel, había una cueva donde vivía un dragón (Smok Wawelski), que atemorizaba a toda la ciudad, matando ganado, otros animales e incluso personas.
Un día el rey Krak que gobernaba con justicia y era muy querido, decidió tomar una decisión; a aquel que fuese capaz de matar al dragón le entregaría la mano de su hija y se celebraría una gran boda.
Muchos caballeros se presentaron pero sin éxito alguno, hasta que llegó un joven zapatero que ideó un plan. Durante la noche mató una oveja y la llenó con azufre y la cosió, colocándola a la mañana siguiente a la entrada de la cueva del dragón, de manera que cuando éste se despertó hambriento fue lo primero que comió. Su estómago empezó a arder y tuvo que beber… y beber agua del río Vistula, se fue hinchando poco a poco hasta que explotó.
De está manera el joven, en el que pocos confiaban; liberó a Cracovia del dragón y se casó con la hija del rey.
Actualmente a la salida de la cueva hay una gran estatua del dragón realizada en 1971 que echa fuego por su boca aproximadamente cada cinco minutos.
Las palomas hechizadas
Durante el siglo XVIII Polonia era un país débil y muchos querían convertirlo en un país fuerte y poderoso, pero para lograrlo tenían que ser reyes y tener el permiso del Papa de Roma.
El duque Henryk Probus quiso intentarlo y sabiendo que no disponía de dinero suficiente para realizar el viaje a Roma, hizo una visita a la bruja Marckanna. Ella para ayudarle, le ofreció todo el dinero que quisiera a cambio de sus mejores caballeros hasta que volviese con la corona, y aceptó, lo que no sabía era que sus caballeros se convertirían en palomas.
Aún así, partió a Roma con el oro para convencer al Papa, pero era muy derrochador y acabo gastándolo todo antes de tiempo. Tuvo que volver a Cracovia, aunque Marckanna no estaba dispuesta a ofrecerle más oro. Desde ese momento los caballeros pertenecieron a la bruja y por eso se dice que según la leyenda hay tantas palomas en la ciudad que esperan a que su señor vuelva y deshaga este hechizo.
Los huesos colgados
Si das una vuelta por la Colina de Wawel, te impresionará la Catedral del mismo nombre. En la entrada principal hay unos huesos colgados como se ve en la foto, dicen que son de mamut y que si algún día caen, empezarán a ocurrir desgracias en la ciudad de Cracovia.
¿Dónde encontrarlas?
Polonia
plac Mariacki 5, 31-042 Kraków, Polonia
Descubriendo las leyendas de Cracovia
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